La Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM) manifiesta su profundo rechazo a la subida de impuestos que el Gobierno ha incluido en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, puesto que considera que no es el camino adecuado para reactivar la economía.
El Ejecutivo de Pedro Sánchez pretende retomar la subida de la fiscalidad de carburantes como la gasolina y el diésel, una medida que no se ha llevado a cabo este año gracias a las enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado que el PNV acordó con el Gobierno.
Asimismo, en el documento que remitirá a Bruselas, se menciona el pago por uso de carreteras, aunque no se dan más detalles sobre esta medida. La CETM recuerda que el pasado mes de julio el Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC) alcanzó un acuerdo con el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana en el que se comprometió a no introducir peajes sin haber alcanzado el consenso con el sector del transporte de mercancías por carretera.
Ante las intenciones del Gobierno actual, la CETM destaca que este tipo de medidas no solo no reactivarían la economía, sino que supondría la pérdida de empleos y el final para muchas empresas que, ante la alerta sanitaria, siguen adelante con enormes dificultades.
La patronal recuerda que el transporte pesado ha sido excluido de ayudas como el Plan Moves III y del Plan Renove y, pese a estas trabas, nuestras empresas siguen apostado por flotas de camiones menos contaminantes y más eficientes.
Además, el Gobierno aspira a subir carburantes como el diésel sin tener en cuenta que, en la actualidad, no hay modelos eléctricos de camiones que dispongan de la autonomía necesaria para emprender largos viajes, ni nuestro país cuenta con la red de puntos de recarga que se necesita.
El transporte por carretera hace una aportación fiscal al Estado por encima de los 11.000 millones anuales, una cuantía que se ha visto reducida frente a años anteriores debido a la crisis actual, pero con la que se puede hacer frente sobradamente al mantenimiento de las infraestructuras y cuya recuperación pasa por incentivar la economía y no por dañar al sector con subidas de impuestos injustas y contraproducentes.
En definitiva, consideramos que estas medidas nos alejan una posible salida de la crisis y no responden a las promesas de un Gobierno que asegurada que “saldríamos más fuertes”. Por último, hay que subrayar que más del 85% de las mercancías se mueven por carretera y el funcionamiento de la economía depende de las empresas de transporte de mercancías por carretera que son las que se encargan de acercar las materias primas y productos.