Los manifestantes que ocupaban la autopista AP-7 a su paso por la localidad fronteriza de La Jonquera (Girona) han reabierto la vía. Los servicios de mantenimiento limpian la calzada para restablecer completamente la circulación, ya que en estos momentos solo está abierto uno de los dos carriles.
Miles de vehículos y sus conductores se han visto paralizados durante más de 24 horas, sin posibilidad alguna de acceder a otras vías de escape, y sin contar con los mínimos servicios básicos (alimentación, descanso, aseos, etc.), poniendo en riesgo, además, las mercancías que transportan, como es el caso de las perecederas (frutas y hortalizas), en cuyo transporte España es el líder europeo.
El Ejecutivo central y el Gobierno de la Generalitat se han olvidado de los transportistas, desechando las peticiones que desde la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM), se les han realizado durante estos días en aras a poder ejercer nuestro derecho a trabajar con libertad.
La desidia de las administraciones, estatal y catalana, ha puesto en grave riesgo la seguridad y el bienestar de nuestros conductores, así como la economía de las empresas de transporte afectadas, sin olvidar que la imposibilidad de cumplir con los servicios de transporte acarreará importantes problemas en todos los sectores de actividad.
Queremos hacer público que durante esta protesta, el sector del transporte se ha sentido huérfano, desamparado, olvidado y ninguneado, por parte de sus representantes en las administraciones.